lunes, 29 de junio de 2009

Badajoz, Centro de Ocio Contemporáneo, 27 de Junio

Pues nada, la primera parte del Tour 2009 ha llegado a su fin. Soy er Dani y me toca hacer la última crónica antes de un merecido descanso.

VIERNES:

Llegamos Miguel y yo a Badajoz de avanzadilla, ya que teníamos negocios (limpios) que atender en esa ciudad antes del bolo. Como algunos sabrán, y sino se lo digo ahora, estuve durante tres años trabajando allí, y de las amistades profesionales que hice han surgido nuevas y suculentas oportunidades que ya comentaré en su momento, pero en otro lado. Habiamos quedado con dos super cracks de la profesión sanitaria/terapéutica. Por motivos laborales, ese día al final solo nos pudimos reunir con una. Desde aquí un besazo a Inés, la super simpática, megaprofesional y excéntrica logopeda, que iba a estar un ratito con nosotros y al final se quedó horas. No la culpamos.

Paseando por Badajoz, encontramos el bar favorito de Miguel.

Como el otro super crack no podía quedar hasta el mediodía del sábado, Miguel y yo nos fuimos de feria. Sí, sí, de feria. Al conocerme la ciudad nos dirigimos rápidamente al centro, y la noche se complicó, entre Miguel dando palmitas, y nuestras greñas, enseguida llamamos la atención de el personal autóctono.

La noche se complica. Obsérvese la cara de autómata que gasto.

Al poco me encontré con mis ex-compañeros de curro. Así que dejé a Miguel en compañía de la Pacense Borrokilla (sí, sí... "Miguel déjate el pelo así como un... abertzale") y yo me puse al día con los compis. Con ellos me fui de parranda dejando al Miguel más caliente que una perra, y millones de cervezas después me piré para el hotel (con cierta urgencia) ,teniendo que mostrar el DNI puesto que no pude pronunciar ni mi nombre a la chavala de recepción.

SÁBADO:

Antes de comer completamos la tarea profesional que dejamos a media el día anterior en un entorno hospitalario, después nos fuimos a comer mientras esperabamos la llegada de la G-furgoneta. El resto de la G llegó para reunirse con nosotros en la sobremesa y comentar la suculenta y porqué no decirlo, risible jugada de Miguel y la mía.

Y dejémonos de divagaciones fiesteras y vamos al grano, la crónica del concierto.

Increiblemente para ser los Gauntlet, llegamos a la sala COC unos minutos más tarde de la hora prevista. La sala en cuestión está montada de la ostia, un escenario amplio, al que solo le faltaba un poco más de fondo, y una muy buena acústica. El gerente de la sala, que llava también TIPO en Badajoz, nos dio todas las facilidades del mundo, así como el técnico de sonido. Muchas gracias tíos, así da gusto.

¿A que parece un bar gaye? Pues no, pero al final acabamos en otro...

Montamos y probamos con la rápidez que da la experiencia y nos dedicamos a descansar, mientras probaba el grupo telonero, Sorrow. Desde aquí un abrazo a esa gente, estupendos en el trato todos. Dispusimos nuestras posaderas en esos sofas made in Tim Burton, pero un poco desviado, que veís en las fotos. Esos minutos previos a la actuación hay que saborearlos.

Los tronos que nos corresponden.

A Kasko se le quedó encajado el kakas.

Nos fuimos a cenar algo y llegamos cuando acaban de empezar Sorrow. Como este vez disponíamos de un amplio camerino-almacén, lleno de elementos esotéricos, nos dirigimos allí para digitar un poco y a ponernos nuestras ropas de chow, algunas tirando más a gayes que otras.

Desde el habitáculo pudimos comprobar como el ambiente de la sala iba mejorando y llegaban más personas. No voy a decir que estaba abarrotada la sala, porque no es cierto, pero si había más de 60 personas, que para ser Badajoz, en feria, pues está muy bien. Pero más importante que el número es la entrega que hubo, como comentaré después.

Tras finalizar Sorrow fuimos para el escenario a cambiar equipo. De nuevo nos vimos 3 de 4 esperando a Miguel. Menos mal que ya lleva unos cuantos conciertos de entrenamiento. Jo-dé lo lento que es este tío.

Pues nada, acoplando y a empezar con "A Sheep...". Y desde el principio lo damos todo como siempre. Y fíjate, que en Badajoz, pues la gente reaccionó y nos llevó en volandas durante toda la actuación. Todas nuestras poses y trucos de guitar hero lo agradecían con un estusiasmo sincero. Joder, muchas gracias peña. Mención especial para los locos de la primera fila que se dejaron el cuello. También para mis ex-compañeras (si, con a, lo siento Paco estás en minoría) que vinieron a vernos, y que estaban todas estupendas (Miguel: "Y usted que lo vea").

Y así fueron cayendo todos los temas del set, con una reacción acojonante de la peña. Hay que decirlo: junto con A Coruña, y Madrid, el mejor concierto de la gira en cuanto a actitud de la gente. Al final terminamos el set y nada, que esta peña no nos dejaba bajar del escenario, así que improvisamos el bis, en forma de "Replica" de Fear Factory, que no lo teníamos ni apuntao en las hojas.


Bis (pero uno de verdad) al canto.

Al finalizar el concierto, muchas fotos con la peña, y la mayor venta de discos y camistas que llevamos en toda nuestra historia. De nuevo gracias peña.



¡Gracias peñaaaaaa!

Tras despedirnos de la gente y quedar con los de mi ex-curro más tarde, aunque sólo quedasen tres valientes (¿pero dónde coño os metísteis el resto?), hicimos un pequeño receso antes de volver a cargar el equipo. Joder cómo cambia la historia cuando te has llevado un buen feedback.

Gran foto de familia.

Tras dejar las cosas en el hotel nos dirigimos al único garito heavy de la ciudad, El Refugio, donde seguimos firmando más discos y haciéndonos más fotos con esta gente tan cojonuda. Volveremos. Después cambiamos de ambiente, y nunca mejor dicho. Y como cóño le explicamos esto a los de Metallia... (mejor no lo hacemos).

La noche finalizó con los más valientes (Miguel y yo) y un par de mi excurro, y siendo objeto de deseo de lo más bonito de Badajoz, pero como buenas rock stars, a veces tenemos que decir que no, así que dimos por concluida la noche y a Miguel le dejé en el pasillo, que esté no ronca, tiene un PROBLEMA.

Retomaremos la actividad grupal unos días antes de nuestra aparición en el Luarca Metal Fest, en Agosto y mientras seguiremos buscando bajista. En Septiembre volveremos a la actividad de directo, que nos quedan muchas ciudades que recorrer y muchas almas que conquistar.

Life on the road... We love it!

Nos vemos en breve.

martes, 16 de junio de 2009

Madrid, Sala Ritmo y Compás, 13 de Junio

Era una tarde de sábado calurosa, pegajosa, tormentosa... Yeah! Como un concierto de la G!! Teníamos ganas de tocar, de sudar y de disfrutar... y esta noche jugábamos en casa.

Son las 5 de la tarde de un sabadete. Con el buche reventón y en el pecho un chorretón nos encontramos con El Gran Agus, ese crack de los controles, técnico de sonido de RyC. Nos abren las puertas. Ya están también por acoba los UNSOULED (lo pongo en gordo y con mayúsculas porque estos chavales no se merecen otra cosa) que comparten escenario con nosotros. Pues manos a la obra. Después de la pertinente descarga de equipo, las pertinentes pruebas de sonido y la pertinente visita al chino Ángel para pillar unos cuantos litritos de birra para el camerino, empezamos a recibir a los colegas que participarán en el chou de esta noche.


Se acerca la hora de apertura de puertas y ya se respira el ambiente preconcertil. Algo de nervios y mucha excitación, que te demuestran que las glándulas suprarrenales están a piñón con la producción de adrenalina... Hemos tocado en esta sala más de una docena de veces, pero esta noche, no sé, tal vez por mi estreno "serio" como frontman, estoy con una carga extra de responsabilidad que me acojona un poquito. Pero contemplando el peazo de actuación que se marcan nuestros paisanos, recibo un chorro de energía buenrrollística-metálica que manda a tomaaaar por khala esos fantasmas. Me oculto al lado de la mesa de sonido, con la Washburn al cuello, haciendo headbanging como un poseso, mientras riffeo al compas de sus canciones: Thrash Metal de la costa este de los States, al más puro estilo Anthrax/Overkill del ochenta y pico, pero con una complejidad en las composiciones digna de los mismos Nevermore. Y no es peloteo. Dani y yo hacemos una rápida incursión al escenario para picarnos las voces en plan James/Jason del estribillo del "Battery" de Metallica, que versionean (todo el mundo dice versionan, pero a mí me suena fatal) magistralmente.

La hermandad del metal: Dani y Miguel metalliqueando con la Unsouled.

Acto seguido, y con la garganta un poco áspera de berrear, me subo a calentar la voz. Arriba ya estamos todos: unos calentando, otros charlando animadamente y otros bebiendo cerveza a espuertas, como el Kepatxa.

Miguel luciendo la roja y Kepatxa con los mismos ojos que Johnny Quest

Nuestro turno. Se proyecta el video de "...Makes Us Stronger" en la pantallaca de la sala, con las luces apagadas y con un volumen algo inferior al deseado. Enhorabuena una vez más al director Kiko Meler y su equipo, porque, a pesar de contar con un presupuesto mínimo, han hecho un trabajo COJONUDO. Más subidote antes de saltar a escena... pero el momento realmente álgido de la noche estaba a punto de llegar.

Dani, Kasko, Möck y yo ya hacemos acto de presencia en el escenario, con el telón aún bajado y con el acople de guitarras con el que solemos comenzar los conciertos rezumando en el ambiente, volvemos a juntar nuestras manos y les digo: "Disfrutad de este momento..." El telón va subiendo poco a poco, la gente empieza a gritar, las pulsaciones suben y tu arma está cargada. La sensación que tienes en esos momentos previos es impagable. Esto es el rock'n'roll...

"¡¡¡Estoy orgulloso de pertenecer a la G!!!"

¡Al turróóón! El riff asesino de "A Sheep In Wolf's Clothing", nuestro habitual opener, es el primer machetazo que asestamos al respetable. Sin un segundo de descanso, la siguiente es el machacón "Winners Race" y el tercer tema, "In The Name Of ( )". A estas alturas ya estábamos chorreando, ahí arriba hacía un calor de la hostia. La siguiente canción va precedida de una dedicatoria al guitarrista probablemente más influyente de los últimos 20 años: "5 Minutes Alone".

Los primeros invitados saltan a escena, Nacho Arriaga (Arwen, Inn Trance) a la batería y Carlos Kepatxa (mmmm...Dreamaker?) al bajo se unen a nosotros en un revival de los Gauntlet del noventa y pico para hacer una versión frenética del clásico "Seeds Of Hate".

Duelo de titabes

El hijo secreto de Scott Columbus

Bajamos un poquito el pistón con la intro del "Cross Of Shame" que es cantada por Dave X (Time Symmetry) y Elenita (que te montes un grupo).

Los Pimpinela del metal

La siguen "Die Away", "Fuel" de Metallica e "Inner Enemy". Y encaramos la recta final del concierto. "¡Demos una calurosa bienvenida a Jose Garrido, de Arwen!" que se pica con nosotros la megadosa "The Hole".

Obsérvese mi cara de idiota ante la inusitada velocidad de los dedos del Joey.

Con el "Mi" final sin apagarse, le sustituye Albert Maroto (mmm...Dreamaker??), quien aporta más gordor todavía al "...Makes Us Stronger", que es coreada por buena parte de los 200 asistentes. Su solo tiene dedicatoria especial para nuestro batería, Kasko. Creo que sólo yo me doy cuenta de ese detalle, jajaja.

Nietzsche tenía razón

Dios, qué subidón de final de concierto, esto parece una competición del Guitar Hero en casa de algún friki. Pero nosotros tocamos de verdad. "Decade", como viene siendo habitual, es la última del set. Ber de Nexx, aparece en el escenario con una Strato color cereza, que viene que ni pintada para poner la guinda al pastel. Me encanta cómo toca este tío, le da un rollo increíble, con esos fill-ins schenkermalmsteenianos que va esparciendo por el tema cuando le sale de los cojones.

"Oye, tío, devuélvele la guitarra a Chesney Hawkes"

Nos despedimos dando las gracias a todos, invitados y asistentes... pero todavía nos guardábamos un as en la manga. Con la presión de las prisas del Agus, ya que después la sala estaba alquilada por Seseñe Mobutu y sus colegas, volvemos al escenario para acometer una desfasante versión del "Replica" de Fear Factory. Jose de Unsouled y Maroto, una vez más, se unen a nosotros en el bis. La cosa se nos va de las manos. Dani medio en bolas y yo aparezco con un lazo de plástico enganchado a los rizos (!) y sin guitarra en ristre voy dando saltos de un lado a otro. Cumpliendo mi palabra, trinco de entre el público a Mariano Palomo, del fanzine Alianza, quien berrea junto a mí por unos segundos. Al final, me vengo arriba y me lanzo al público, que aguanta con aplomo mis 95 kilos. Joder, ¡qué derroche de adrenalina!

Pues no parece que estén disfrutando mucho...

Y este tampoco

En fin, una noche que no olvidaremos nunca, y espero que vosotros tampoco. Hemos demostrado una vez más que siempre ponemos toda la carne en el asador (y nunca mejor dicho). Gauntlet te molará más o menos, pero nuestra entrega en los directos es indiscutible.

¿Es "Gordo" de Ratos de Porao? Ah, no, es Miguel.

Fue una lástima que tuviéramos que despejar la sala tan rápido, ya que no pudimos saludar y charlar con toda la gente que acudió. A toda leche y mientras apurábamos las últimas Heineken, metimos todos los trastos en la furgo y de vuelta al local. Una vez guardado todo, Santi y sra. se retiraron al calor del hogar, Kasko y sra. fueron a devolver la furgo y tres cuartos de lo mismo. Kiko (el dire) y servidor, obviamos el cansancio que padecíamos y tiramos, cómo no, para Vallekas a encontrarnos con Dani, sra. y cuñada, que ya andaban por allí con buena parte de los asistentes al concierto. Pues entre risas, colegas y alcohol terminó la noche... aunque a mí me dieron las 10 de la mañana desayunando en Cuatro Caminos.

Nos adoran... y no las culpamos.

Luego, que si estoy cansao...

domingo, 7 de junio de 2009

Sevilla, Sala Malandar, 6 de Junio

Se ve que le encanta.

Llagamos a Sevilla con el diluvio universal. Después de descansar en el apartahotel, de nudistas negros con las puertas de las habitaciones abiertas, y tras tomarnos unas cruzcampo "que están frejquitas, pisha", llegamos a la sala a descargar el equipo con el chaparrón encima. Allí nos encontramos con la gente de Histeria, y tras las presentaciones de marras, empezamos a descargar el equipo, nosotros. Sí, solo nosotros. Al final se armaron de coraje y nos ayudaron a meter en la sala ese nuestro equipo, parte del cual ellos mismo iban a utilizar en su actuación.

Menos pose, y más marcapasos.

La sala en sí está muy bien montada y la gente de allí, de un trato fantástico. Mención especial para el dueño que se tiró el rollo de sobremanera con nosotros. Desde aquí un abrazo tronco. El técnico de sonido también estuvo cojonudo ayudándonos en todo momento y realizando una labor fantástica con los controles.

Montamos y probamos sonido rápidamente, y dejamos a los Histeria que montasen lo suyo. Tras lo cual nos fuimos a tomar algo juntos y ya vimos como se avecinaba la tarde, a puntito estuvimos de rozar la peor entrada de la gira, que fue en Murcia. Con un pequeño fallo que hubo con la gente de la sala se comentó al grupo local los horarios y tiempo de actuación, que no parecían tener muy bien calculados, lo cual unido a aque alguna estrella les dejó esperando más de 5 minutos en el escenario al resto de la banda, les obligó a recortar su set.

Tras ellos salimos nosotros. Vendaval sónico como es de costumbre, poses, melenas girando, y sudando a mares desde el principio. Todo parecía ir genial. La peña de las primeras filas, especialmente las féminas no paraban de mover esas preciosas almendras. Los tíos estaban más parados (¡maricones!). Llega la primera versión. Miguel da un salto al público y al volver empieza a hablar en arameo, y no hay quién le entienda. A todo esto sale disparao y se mete en el camerino. Los tres restantes nos dedicamos a improvisar un blues hasta que vuelva de su jamacuco coronario. Los segundos parecen horas. Al final, tras un intervalo de 5 o 6 minutos reaparece. Esto no ha sido nada y pido una ovación del respetable. Nos la conceden. A tomaaaar por khala y seguimos machacando. Hay que recortar el set por el gañán del frontman pero da igual. Terminamos el concierto convenciendo a los pocos que hay, pero se les ve muy sinceros en sus declaraciones.

Desde aqui un beso a estas chavalas tan majas.

Tenemos que decir, que de nuevo volvemos a la capital, no con la sensación, sino con la convicción de que la implicación del grupo local en el concierto ha sido mínima. Y está comprobado, no es cosa nuestra. Varias personas llegaron después del concierto diciendo que no habían visto ni un cartel en los garitos heavis de la ciudad, ni se habñia ununciado en ningún foro de internet, ni tan siquiera el de Sevilla Rock, que por lo visto allí es el más visitado ¿para qué entonces les mandamos los carteles? ¿Para que se los queden en su casa? Por no haber, no había ninguno en la sala en sí... Lamentable.

Bueno, lo mismo de esto sacamos otra visita a Sevilla en Julio.